La calle Hernando de Zafra está situada en el entorno de la calle Cristo de la Epidemia y casi continuación de la de Isabel la Católica.
Nuestro personaje Hernando de Zafra nace en Zafra sobre el 1445, de familia humilde y posiblemente cristiana nueva.

Encontramos a don Hernando de Zafra inicialmente actuando como letrado en la corte de Enrique IV, pero siendo persona de gran inteligencia y de honestidad probada, pasó a ser contador real del rey, en cuyo bando militó durante el problema sucesorio. A la muerte de Enrique IV se decantó por la nueva línea sucesoria de la infanta Isabel.
Ya bajo el mandato de los Reyes Católicos, probablemente en 1475, fue ayudante del Contador Real don Rodrigo de Ulloa, de quien ya hemos hablado.
Se supone que con ese cargo estuvo durante la toma de Málaga, periodo en el que fue Escribano Mayor de Rentas para esta ciudad, incluso antes de la toma.
En 1487, al finalizar de la toma de Málaga los Reyes encargan as Hernando de Zafra una especie de “auditoría” sobre los gastos incurridos en las acciones de guerra, incluyendo los bienes incautados por la Inquisición, llegando a inspeccionar las cuentas de la Santa Hermandad.
Consiguió gran prestigio al llevar personalmente las capitulaciones con Boabdil para la entrega de la ciudad de Granada, siendo nombrado Regidor Perpetuo granadino, hasta su fallecimiento en 1507.
Fue finalmente enterrado en el convento de Santa Catalina de Siena que posteriormente su viuda mandó construir en la ciudad de Zafra.